Aunque esta suele ser una tarea gratificante, el cuidado de personas mayores también puede resultar acabando agotadora, a veces incluso frustrante, sobre todo cuando uno no sabe por dónde empezar.
Por ello te ofrecemos 10 consejos con el fin de protegerlos y cuidarlos como se merecen:
1. Seguridad: Si tienes una bañera en casa lo ideal es cambiarla por una ducha, proporciona mayor seguridad, comodidad y funcionalidad. Además el baño parecerá mucho más amplio y podrás destinar el espacio sobrante para otros usos.
Otra buena opción es meter una silla para que nuestros mayores puedan acomodarse mientras se asean. Instalar barras de apoyo, tanto dentro como fuera de la ducha, también pueden serles de gran utilidad.
2. Confort: Poner cojines adicionales en el asiento de sofás o sillas, esto les permita sentarse y levantarse con menor esfuerzo. También son de gran ayuda los sillones eléctricos, si disponen de masaje y calor incorporado aún mejor. Para adultos de edad más avanzada es preferible que tengan reposabrazos.
3. Déjate ayudar: Si sientes que la carga es demasiada pide ayuda. Habla con tus seres queridos, pero hazlo con calma y sin culpar a nadie. Indica claramente lo que esperas que los demás hagan por ti: ir al supermercado, llevar a la persona a la que cuidas a las citas con el médico, llevar a los niños al cole,etc.
4. Sé claro: Habla con tus mayores acerca de los planes que tienen para cuando el fin se acerque: puede sonar desagradable, pero frecuentemente la gente mayor aprecia que escuchen sus deseos. Si es posible escríbelos para que no exista confusión , sobre todo si se diera el caso en el que necesitase asistencia para vivir dignamente.
5. No te sientas culpable si vives lejos: Es grande el remordimiento que aflige a quienes cuidan de un miembro de la familia pero viven lejos, ya que por lo general cambian de horarios, pierden días de trabajo y gastan mucho dinero, además pasan horas hablando con médicos; sin embargo, no puedes estar las 24 horas del día con ellos. Haces lo que puedes, no es tu culpa.
6. Comunicación: Prepara una lista con los números de contacto imprescindibles (nombres, números telefónicos, direcciones de correo electrónico), en ella incluye a amigos, vecinos o médicos. Déjala visible por si ocurriese alguna emergencia y no estuvieras en casa, no te olvides de poner un teléfono a mano.
7. Grupo de apoyo: En ocasiones el que cuida de otra persona necesita a alguien que lo escuche cuando quiera desahogarse. Hablar con personas que han pasado por la misma situación puede ser de gran utilidad. Un grupo de apoyo, ya sea a través de redes sociales o en el lugar donde vives, puede servir para recibir orientación, consejo y consuelo.
8. Tiempo para ti y tu familia: Sigue en contacto con tus amigos y dedica tiempo a tu familia. No dejes de asistir al taller que tanto te gusta, toma un café con tu gente o haz cualquier otra actividad. Es importante seguir con las actividades y las relaciones que estimulan tu mente y tu espíritu. ¡Aprende a compaginar y no desatiendas al resto!
9. Duerme suficiente: Nadie puede funcionar si no ha dormido bien. La falta de sueño disminuye la capacidad de concentrarse, solucionar problemas y recordar. Procura dormir ocho horas durante la noche. Tómate un respiro de vez en cuando y pídele a alguien que te reemplace durante unas horas. Si puedes permitírtelo contrata a una persona para que te ayude con los cuidados.
10. Cuida tu salud: Como dijo un experto, el ejercicio aeróbico es como un fertilizante para el cerebro. No sólo mantiene el cuerpo en forma, sino también mantiene la agudeza mental. Si no puedes ir al gimnasio, utiliza vídeos de ejercicios online. Pídele a un amigo que te reemplace unos 30 minutos al día para que puedas ir a caminar o correr. Encuentra la forma de hacerlo.
Trata de aplicar estos consejos y tanto tú como tus familiares conviviréis en armonía. Recuerda, el cuidado de personas mayores es importante, ¡algún día serás tú!
Fuente masquesalud.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario